Royal Mail : la Huelga Postal "se reparte" demasiado tarde...
TRADUCCIÓN
La Huelga Postal que "se reparte" demasiado tarde...
http://news.independent.co.uk/business/analysis_and_features/article2814665.ece En los años ochenta, los carteritos amenazaron mediante piquetes con la intención de paralizar a Gran Bretaña..
Los hechos esta vez son bien diferentes, dice Andrew Murray-Watson (Un Jimenez el Santo cualquiera de la nuestra amada y vecina hermana, la pérfida Albión...)
publicado: Domingo 29 de julio de 2007 The Independent
Hace veinte años, la huelga de los trabajadores postales llegó a protagonizar y mostrar una muy larga sombra...
La perspectiva de las cartas que se apilaban en las oficinas de clasificación a lo largo del país fue considerada por algunos cuartos como nada menos que una emergencia nacional. En la Gran Bretaña de la Thatcher, los carteros apalancaron sus bicicletas en lo que nada más habían visto como el esbozo de privatización que comenzaba en Royal Mail.
Dos décadas latentes los problemas, y el personal de 140.000 almas asegura que se está formando otra vez. Esta vez han sido motivadas por la “modernización” de las Post Offices, de una oferta de paga que la CWU (unión de trabajadores de la comunicación) ve como inadecuada y de la perspectiva de unas pensiones menos abundantes en el futuro.
Este miércoles se consideró el comienzo de una quincena de acciones en la industria que promete interrumpir los repartos del correo. Pero esto no es 1987; no parece que hoy le importe tanto a la opinión pública.
El CWU ha rechazado la oferta del Royal Mail de una subida de la paga de un 2.5 por ciento y ha advertido que los planes de modernización conducirán a 40.000 pérdidas de puestos de trabajo. Demanda que la gerencia ha rechazado entrar en negociaciones y que sus ofertas (de la Gerencia) conducirán a los clientes a recibir un servicio más pobre.
Por su parte, para Royal Mail la demanda de simplemente ofrecer a sus trabajadores más dinero no puede ser cubierta, y precisa que pagan al personal los rivales comerciales de la compañía cerca de 25 por ciento menos de salario. Royal Mail está en trámites de recibir un préstamo de £4bn (€ 3,5 bn) del gobierno, para que la puesta en marcha de una tarifa comercial, pueda ser utilizada para el programa de modernización y apuntalar su fondo de jubilación (que tiene actualmente un déficit estimado de £6bn), al cual la compañía contribuye ya con £800m al año.
Los resultados financieros del Royal Mail del año pasado, sacados a la luz hace
realtivamente bien poco, han demostrado que apenas tuvo beneficios de funcionamiento para el 2007. La compañía está en negociaciones con el CWU sobre sus ofertas sobre las pensiones.Todo esto tras la aparición la semana pasada de un informe en un periódico sindical que demandaba por parte de la dirección al personal de Royal Mail la necesidad de trabajar por cinco años más para poder recoger su paga del retiro. Royal Mail ha negado la alegación, diciendo que los documentos sacados a la luz como la base de la historia eran anticuados.
Pero Allan Leighton, el presidente de la compañía, ha destacado en varias ocasiones la necesidad de la modernización frente a la competencia cada vez mayor de rivales tales como TNT, Uk Mail, DX Group y SMS.
El mercado postal BRITÁNICO se ha desregularizado completamente en los últimos 18 meses.
En la mayoría de los casos, Royal Mail es remunerado por sus rivales comerciales por entregar sus excedentes de correo “la milla final” entre la oficina de clasificación y la puerta de los clientes con la base de 13 pennies por objeto repartido. Royal Mail demanda que debido a su alta base de coste, la compañía pierde “un par de peniques más o menos” en cada objeto que reparte para las otras compañías. Esto es un motivo de disputa con sus rivales, que desean que el Postcomm, el regulador postal, reduzca el coste de "la última milla", "el último tramo".
Estas compañías rivales están interesadas únicamente en el mercado de empresas y, a diferencia de Royal Mail, no están cargadas por la obligación universal del servicio SPU.
Entre desafíos más grandes a los que Royal Mail se enfrenta es a la necesidad urgente de poner al día su infraestructura anticuada. Un ex-ejecutivo cuenta: "Vete a cualquier centro de clasificación grande y verás a docenas de trabajadores que clasifican el correo a mano. Haz lo mismo en uno cualquiera de los rivales del Royal Mail, y verás las máquinas relucientes hacer del mismo trabajo con apenas un ser humano a la vista.”
Pero los fondos para la nueva maquinaria son difíciles de obtener, pues la organización lucha para frenar sus gastos generales. James Greenbury, ejecutivo de DX, dice: “Por mis cálculos, los costes del Royal Mail son £1bn al año, demasiado... No podría dormir por la noche si dirigiera una corporación mercantil con ese nivel del costes.”
Es el mercado comercial es el que está más afectado por la huelga de CWU. De acuerdo con miembros de Royal Mail, los 100 clientes corporativos más grandes de la compañía 100 cuantifican el 40 % por ciento de su negocio. En total, sobre el 90 % de los artículos que se llevan están relacionados con el mercado comercial.Mientras pase más tiempo de huelga, más empresas acudirán a proveedores de la competencia.
Sr. Greenbury : “En el mes pasado, hemos ganado £10m en nuestro nuevo negocio - una cantidad que puede ser que habríamos esperado ganar sobre el curso de un año entero.”Pero, añadió, la huelga de CWU ha perjudicado la confianza en toda la industria por completo.
De ese sentimiento se hacen eco las PYMES (pequeñas y medianas empresas). Un portavoz cuenta: “Cerca del 94% de nuestros miembros utilizan Royal Mail exclusivamente, pues no son lo bastante grandes para ser considerados como clientes atractivos por otros consorcios postales. Si la huelga continúa este verano, un nº mayor de nuestros miembros tendrán problemas de cashflow (liquidez) ya que el 69 % todavía envían facturas por correo.” ´
La tendencia para que las empresas pequeñas y de tamaño medio usen el correo
electrónico para realizar las operaciones financieras se acentuará - dañando los ingresos de Royal Mail a la larga, nos cuenta.
Un portavoz de Postwatch, el guardián independiente de los servicios postales, dice:
“Esta medida de presión serán malas noticias para los clientes a corto plazo y para la industria a largo plazo. Las compañías postales no sólo están para competir entre sí, sino que ellas también están compitiendo contra otros medios tales como el email.Esta huelga acelerará la disminución de servicios postales sólo y estará ocurriendo en el peor momento posible. La industria tiene que estar trabajando en conjunto. En vez se están matando a sí mismos."
“La idea del cartero de vecindario que camina con dificultad a la puerta delantera de las casas con todo tipo de clima es una de las que el CWU saca a la luz siempre que percibe una amenaza para sus miembros. De hecho, por ejemplo la semana pasada, un cartero en Evesham, Worcestershire, utilizó su propio coche 4x4 e hizo frente a las crecidas en aumento en las inundaciones para entregar las copias del nuevo libro de Harry Potter.
Pero mientras este tipo de servicio personalizado todavía casi pervive; tristemente para la mayoría de los consumidores, especialmente aquellos que viven en una ciudad, el servicio repartido por la Oficina Postal es típicamente bastante pobre. Colas inmensas en los mostradores, personal que sirve de muy poca ayuda en las oficinas de clasificación/carterías y un primer reparto a cualquier hora del día han ido rompiendo la especial relación entre los clientes y el cartero.
Y en un mundo donde los mensajes de email y los SMS han conducido a la comunicación inmediata, el aprieto en Royal Mail apenas no se parece que se vaya a notar mucho. Si las medidas de presión continúan en el otoño, podemos darle la espalda a lo que solía ser una de las instituciones más respetadas en Gran Bretaña.
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Los hechos esta vez son bien diferentes, dice Andrew Murray-Watson (Un Jimenez el Santo cualquiera de la nuestra amada y vecina hermana, la pérfida Albión...)
publicado: Domingo 29 de julio de 2007 The Independent
Hace veinte años, la huelga de los trabajadores postales llegó a protagonizar y mostrar una muy larga sombra...
La perspectiva de las cartas que se apilaban en las oficinas de clasificación a lo largo del país fue considerada por algunos cuartos como nada menos que una emergencia nacional. En la Gran Bretaña de la Thatcher, los carteros apalancaron sus bicicletas en lo que nada más habían visto como el esbozo de privatización que comenzaba en Royal Mail.
Dos décadas latentes los problemas, y el personal de 140.000 almas asegura que se está formando otra vez. Esta vez han sido motivadas por la “modernización” de las Post Offices, de una oferta de paga que la CWU (unión de trabajadores de la comunicación) ve como inadecuada y de la perspectiva de unas pensiones menos abundantes en el futuro.
Este miércoles se consideró el comienzo de una quincena de acciones en la industria que promete interrumpir los repartos del correo. Pero esto no es 1987; no parece que hoy le importe tanto a la opinión pública.
El CWU ha rechazado la oferta del Royal Mail de una subida de la paga de un 2.5 por ciento y ha advertido que los planes de modernización conducirán a 40.000 pérdidas de puestos de trabajo. Demanda que la gerencia ha rechazado entrar en negociaciones y que sus ofertas (de la Gerencia) conducirán a los clientes a recibir un servicio más pobre.
Por su parte, para Royal Mail la demanda de simplemente ofrecer a sus trabajadores más dinero no puede ser cubierta, y precisa que pagan al personal los rivales comerciales de la compañía cerca de 25 por ciento menos de salario. Royal Mail está en trámites de recibir un préstamo de £4bn (€ 3,5 bn) del gobierno, para que la puesta en marcha de una tarifa comercial, pueda ser utilizada para el programa de modernización y apuntalar su fondo de jubilación (que tiene actualmente un déficit estimado de £6bn), al cual la compañía contribuye ya con £800m al año.
Los resultados financieros del Royal Mail del año pasado, sacados a la luz hace
realtivamente bien poco, han demostrado que apenas tuvo beneficios de funcionamiento para el 2007. La compañía está en negociaciones con el CWU sobre sus ofertas sobre las pensiones.Todo esto tras la aparición la semana pasada de un informe en un periódico sindical que demandaba por parte de la dirección al personal de Royal Mail la necesidad de trabajar por cinco años más para poder recoger su paga del retiro. Royal Mail ha negado la alegación, diciendo que los documentos sacados a la luz como la base de la historia eran anticuados.
Pero Allan Leighton, el presidente de la compañía, ha destacado en varias ocasiones la necesidad de la modernización frente a la competencia cada vez mayor de rivales tales como TNT, Uk Mail, DX Group y SMS.
El mercado postal BRITÁNICO se ha desregularizado completamente en los últimos 18 meses.
En la mayoría de los casos, Royal Mail es remunerado por sus rivales comerciales por entregar sus excedentes de correo “la milla final” entre la oficina de clasificación y la puerta de los clientes con la base de 13 pennies por objeto repartido. Royal Mail demanda que debido a su alta base de coste, la compañía pierde “un par de peniques más o menos” en cada objeto que reparte para las otras compañías. Esto es un motivo de disputa con sus rivales, que desean que el Postcomm, el regulador postal, reduzca el coste de "la última milla", "el último tramo".
Estas compañías rivales están interesadas únicamente en el mercado de empresas y, a diferencia de Royal Mail, no están cargadas por la obligación universal del servicio SPU.
Entre desafíos más grandes a los que Royal Mail se enfrenta es a la necesidad urgente de poner al día su infraestructura anticuada. Un ex-ejecutivo cuenta: "Vete a cualquier centro de clasificación grande y verás a docenas de trabajadores que clasifican el correo a mano. Haz lo mismo en uno cualquiera de los rivales del Royal Mail, y verás las máquinas relucientes hacer del mismo trabajo con apenas un ser humano a la vista.”
Pero los fondos para la nueva maquinaria son difíciles de obtener, pues la organización lucha para frenar sus gastos generales. James Greenbury, ejecutivo de DX, dice: “Por mis cálculos, los costes del Royal Mail son £1bn al año, demasiado... No podría dormir por la noche si dirigiera una corporación mercantil con ese nivel del costes.”
Es el mercado comercial es el que está más afectado por la huelga de CWU. De acuerdo con miembros de Royal Mail, los 100 clientes corporativos más grandes de la compañía 100 cuantifican el 40 % por ciento de su negocio. En total, sobre el 90 % de los artículos que se llevan están relacionados con el mercado comercial.Mientras pase más tiempo de huelga, más empresas acudirán a proveedores de la competencia.
Sr. Greenbury : “En el mes pasado, hemos ganado £10m en nuestro nuevo negocio - una cantidad que puede ser que habríamos esperado ganar sobre el curso de un año entero.”Pero, añadió, la huelga de CWU ha perjudicado la confianza en toda la industria por completo.
De ese sentimiento se hacen eco las PYMES (pequeñas y medianas empresas). Un portavoz cuenta: “Cerca del 94% de nuestros miembros utilizan Royal Mail exclusivamente, pues no son lo bastante grandes para ser considerados como clientes atractivos por otros consorcios postales. Si la huelga continúa este verano, un nº mayor de nuestros miembros tendrán problemas de cashflow (liquidez) ya que el 69 % todavía envían facturas por correo.” ´
La tendencia para que las empresas pequeñas y de tamaño medio usen el correo
electrónico para realizar las operaciones financieras se acentuará - dañando los ingresos de Royal Mail a la larga, nos cuenta.
Un portavoz de Postwatch, el guardián independiente de los servicios postales, dice:
“Esta medida de presión serán malas noticias para los clientes a corto plazo y para la industria a largo plazo. Las compañías postales no sólo están para competir entre sí, sino que ellas también están compitiendo contra otros medios tales como el email.Esta huelga acelerará la disminución de servicios postales sólo y estará ocurriendo en el peor momento posible. La industria tiene que estar trabajando en conjunto. En vez se están matando a sí mismos."
“La idea del cartero de vecindario que camina con dificultad a la puerta delantera de las casas con todo tipo de clima es una de las que el CWU saca a la luz siempre que percibe una amenaza para sus miembros. De hecho, por ejemplo la semana pasada, un cartero en Evesham, Worcestershire, utilizó su propio coche 4x4 e hizo frente a las crecidas en aumento en las inundaciones para entregar las copias del nuevo libro de Harry Potter.
Pero mientras este tipo de servicio personalizado todavía casi pervive; tristemente para la mayoría de los consumidores, especialmente aquellos que viven en una ciudad, el servicio repartido por la Oficina Postal es típicamente bastante pobre. Colas inmensas en los mostradores, personal que sirve de muy poca ayuda en las oficinas de clasificación/carterías y un primer reparto a cualquier hora del día han ido rompiendo la especial relación entre los clientes y el cartero.
Y en un mundo donde los mensajes de email y los SMS han conducido a la comunicación inmediata, el aprieto en Royal Mail apenas no se parece que se vaya a notar mucho. Si las medidas de presión continúan en el otoño, podemos darle la espalda a lo que solía ser una de las instituciones más respetadas en Gran Bretaña.
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